Ir al contenido principal

Saltando el evento de la muerte.

2 Reyes 2:1-11

El suceso final en la vida de Elías quizás fue el más emotivo de toda su vida. Él fue llevado al cielo sin tener que enfrentar la muerte. La Biblia dice que Elías fue “traspuesto”.

Su vida ministerial fue de aproximadamente unos 15 a 20 años, pero lo que fue público y que se conoce de Elías fue mucho más breve que eso.

En un momento en que estaba pasando por una gran depresión en su vida, cuando estaba bajo un árbol de enebro, él oró pidiendo la muerte, pero cuando llegó el momento de ser traspuesto, él estaba agradecido de que Dios no le haya contestado aquella petición.

La trasposición de Elías, debía ser en un momento designado especialmente por Dios. Mientras tanto Elías tuvo que aprender mucho, sobretodo de la absoluta obediencia a las direcciones de Dios, ya que éstas eran necesarias para lograr la bendición de Dios.

Elías empezó su viaje desde Gilgal para luego llegar al lugar de su ascensión, y Eliseo insistió en ir con él. Este viaje involucraba una gran prueba para Eliseo, quien debía ser el sucesor de Elías.

Desde nuestro punto de vista quizás veamos que Elías estaba renuente a dejar que Eliseo vaya con él. Pero esto en realidad, puede ser parte de la prueba del joven Eliseo. Elías estaba sólo en su ministerio, y era humilde; quizás sentía que su cercana trasposición era demasiado sagrada para dejar que otros la vieran.

Podemos aprender lecciones importantes de esta experiencia. Si deseamos contemplar la Gloria de Dios y ser aptos para participar en el servicio a Dios, debemos madurar en Cristo, y aprender a obedecer las instrucciones de Dios, que son necesarias para lograr las bendiciones de Dios y así poder llegar a nuestro final eterno con Dios.

Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.  (1 Tesalonicenses 4:17)

 

Traducido y adaptado por David Luzuriaga -www.familialuzuriaga.blogspot.comTomado de Faith Walk, by Woodrow Kroll and Tony Beckett Copyright © 2007 The Good News Broadcasting Association, Inc. (Back to the Bible) Lincoln, Nebraska, USA. Used by permission. All rights reserved www.backtothebible.org

Entradas más populares de este blog

Nuestra confianza está en “nada”.

Romanos 8:22-39 El periódico nos recuerda cada día la incertidumbre de la vida. Cosas suceden que son inesperadas, las fortunas cambian de mano, vidas llegan a su fin inesperadamente, etc. Una de las necesidades básicas de los seres humanos es sentirse seguro, pero los acontecimientos del día nos recuerdan la condición de inseguridad que viene de las incertidumbres de la vida. Simplemente no sabemos lo que sucederá mañana. Es por eso que nos dirigimos a la Biblia. En ella encontramos razones para sentirnos seguros. Estamos seguros de que: • Su objetivo no será frustrado. Puesto que Dios es por nosotros, ninguno puede estar en contra de nosotros (v. 31). • Su generosidad no se apagará. Dado que Él no ha escatimado en dar a su Hijo, Dios no va a negarnos nada que se necesite para nuestro cuidado. (v. 32). • Su perdón no se cancela. Quien quiera acusarnos no podrá tener éxito, puesto que Dios, nuestro juez ya nos ha justificado (vv. 33-34). • Su amor no se rompe. Dios nos ha re...

¿Considero mi muerte ahora?

Romanos 6:11-14 La consideración se basa en una verdad absoluta. No podemos considerar algo como verdad, si no es realmente verdad. Es cierto que Cristo murió por nosotros y que cuando creemos en ÉL como Salvador, nosotros morimos como ÉL. Eso es un hecho. Y en que ÉL vive, y nosotros también vivimos. Esto también es un hecho. Así la consideración está basada en hechos reales y no en experiencias personales. Yo no me considero a mi mismo como muerto al pecado porque me siento muerto. Tampoco me considero vivo para Dios, porque me siento vivo. La experiencia es importante cuando le damos su lugar y la ocupamos en el lugar que debe ser ocupada. Pero la experiencia no determina la verdad. Así que, sabiendo lo que es verdad, debemos considerar la verdad; y luego vendrá una apropiada experiencia en base a la verdad que conocemos. Quizás usted diga: “Pero yo le fallo a ÉL, aún después de contar con el hecho de que he muerto al pecado; por lo tanto no debo estar muerto al pecado”. N...

Tu deuda con el Espíritu Santo

Romanos 8:6-17 No es pecado el ser tentado, pero sí es pecado dejarse llevar y ceder a la tentación. Así que en el momento en que llega la tentación, es hora de aplicar Romanos 8:13 “hacer morir las obras de la carne, por el poder del Espíritu Santo” Note que es solamente a través del Espíritu Santo que efectivamente lo podemos hacer. Esto nos llama a tener una nueva actitud. Debemos reconocer que somos responsables por nosotros mismos. No podemos eludir nuestra responsabilidad simplemente diciendo: “bueno, es trabajo del Espíritu Santo, así que yo no soy responsable” El Espíritu Santo no va a trabajar, ni puede trabajar si nuestras mentes no están determinadas a odiar el pecado y rechazar lo que nuestra naturaleza pecaminosa nos incita a hacer. No es simplemente un asunto de sentimiento el odiar el pecado, sino que es una determinación de nuestra voluntad. La mente es el asiento de la voluntad, y debemos usar nuestra capacidad de pensamiento para elegir entre lo que es bueno...